Hoy en día hay un desbalance entre cómo y cuánto utilizamos de los recursos naturales, cómo vivimos de y con la naturaleza, y la calidad de vida y salud de los humanos, lo cual está fuertemente ligado con la salud del medio ambiente (SEDATU, 2020).
La escala local juega un papel importante para establecer acciones concretas que contribuyan a mitigar este desbalance. En este sentido, resulta importante analizar el impacto que tiene la acción humana en espacios como el Centro Histórico de Torreón; en donde convergen un gran tránsito de personas y que cuenta con una acumulación significativa de unidades económicas (14.58% de la totalidad del municipio); por lo que se considera como un espacio urbano de gran actividad.
El impacto al medio ambiente se puede analizar de diversas maneras, una de ellas es a través de la masa arbórea y su impacto en la temperatura superficial urbana.
A partir del análisis de percepción remota realizado por el IMPLAN Torreón en 2018, a través de la imagen satelital LANDSAT 8 tomada en junio de 2017, se determinó que la temperatura media superficial urbana, en el Centro Histórico, era de 45.6°C. Si bien, existen áreas en Torreón con temperaturas superiores, el Centro Histórico presenta temperaturas próximas a las temperaturas más altas en la ciudad y superior a la temperatura promedio para el municipio (44.24°C). Esto se asocia a la poca disponibilidad de áreas de absorción debido al dominio que existe en el territorio de superficies pavimentadas (edificios y vialidades) y la baja cobertura de masa arbórea, cuyo Índice de Vegetación promedio para el sitio, y establecido a partir del mismo análisis, fue de 0.096, considerado como un Índice de Vegetación bajo, siendo 1 el valor óptimo y que se interpreta como una presencia pobre de vegetación.
La infraestructura verde surge entonces como una respuesta para mitigar el impacto que tienen las acciones humanas en los ecosistemas y se define como un “sistema de infraestructura urbana que fortalece a los socio-ecosistemas para hacer frente al cambio climático, a través de la implementación de iniciativas de planeación, gestión y diseño multifuncionales que abordan diversas escalas. Se constituyen por redes que integran estrategias y proyectos basados en la naturaleza para proveer servicios ecosistémicos y múltiples beneficios” (SEDATU a partir de GIZ, 2020).
La implementación de infraestructura verde trae beneficios a la ciudad como reducción de riesgo por inundaciones al permitir contar con mayores áreas de absorción que facilitan la filtración de agua al subsuelo; ahorro de costos en infraestructura gris, obras de mantenimiento y daños; incremento en el valor de las propiedades contiguas a las áreas de implementación; regulación del microclima y reducción de las islas de calor; además de mejora en la calidad del aire, ya que ayuda a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEIs) y que por ende contribuye a una mejor salud pública; por mencionar algunos beneficios.
En el caso del Centro Histórico, las calles son el principal espacio urbano en donde se puede implementar infraestructura verde para favorecer la resiliencia urbana. Es en estos espacios, que además conforman el 28.52% de la su superficie urbana del Centro Histórico, en donde se tiene una gran área y por lo tanto una buena oportunidad para implementar estrategias que contemplen este tipo de infraestructura; principalmente en las áreas en donde se presentan las temperaturas más altas como el área delimitada por la colonia Primitivo Centro, en la que se registran temperaturas superficiales de hasta 46.06°C; o en zonas de riesgo natural de inundación por encharcamiento como es el caso de Blvd. Independencia y sus alrededores; y el área delimitada de la Av. Morelos al Blvd. Revolución y de las calles Rodríguez a Zaragoza; con el fin de hacer frente a este tipo de eventualidades naturales de una manera eficiente y amigable con el medio ambiente.
Este es un momento ideal para implementar estrategias de Infraestructura verde no solo en el Centro Histórico de Torreón, sino a nivel municipal, pues por primera vez se cuenta con un Reglamento de Desarrollo Urbano y Construcción que no solo considera a la infraestructura verde como concepto sino que la incluye como norma técnica con el fin de garantizar su correcta implementación y contribuir principalmente al manejo integral de aguas pluviales, buscando que en un futuro próximo en Torreón tengamos calles y espacios públicos más sustentables, resilientes, inclusivos y seguros para sus habitantes.
Bibliografía
SEDATU. (2020). Curso Calles e Infraestructura Verde. México: Gobierno de México.
SEDATU, SEMARNAT & GIZ. (2018). Implementación de Infraestructura Verde como estrategia para la mitigación y adaptación al cambio climático en ciudades mexicanas, hoja de ruta. México: Gobierno de México.