De acuerdo a la misma ENOE, la remuneración por día de las mujeres es de 256 pesos, en promedio, con 296.7 pesos en las áreas mas urbanizadas y 184 pesos en las zonas rurales, lo que representa una diferencia del 61.25%.
La participación de las mujeres en el mercado laboral cumple con un papel fundamental en el crecimiento de cualquier economía. Generar las condiciones necesarias de inserción y crecimiento en un mercado laboral que garanticen igualdad de oportunidades, empleos de calidad, niveles óptimos de remuneración y disminución de brechas salariales son indispensables para el desarrollo de todas las naciones.
La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) reportada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) presentó los resultados del cuarto trimestre de 2021 que ofrece las estimaciones para cuatro tamaños de localidad a nivel nacional, de las 32 entidades federativas, así como de 39 ciudades de interés. En este periodo, la Población Económicamente Activa (PEA) del país fue de 58.2 millones de personas, superando por 3.1 millones respecto a la registrada en el cuarto trimestre de 2020, en el cual la PEA representó 59.7% de la población de 15 años y más.
En la Zona Metropolitana de la Laguna (ZML), la PEA1 se ubicó en 573,798 de los cuales el 334,125 son hombres (58.23%) y 239,673 mujeres (41.77%) para el cuarto trimestre del 2021. La Población Ocupada (PO)2 se ha ubicado en 552,411 de las cuales 229,913 son mujeres, representando el 41.74% de la PO total, mientras que la Población Desocupada (PD) en 21,387, resultando en una tasa de desocupación de 3.87%.
De acuerdo con la misma ENOE, la remuneración por día de las mujeres es de 256 pesos, en promedio, con 296.7 pesos en las áreas más urbanizadas y 184 pesos en las zonas rurales, lo que representa una diferencia del 61.25%. Por otro lado, se puede observar que, en promedio, las mujeres económicamente activas dedican 26.4 horas semanales a las labores del hogar, mientras que los hombres solo 8.29 horas semanales.
A nivel nacional, la población femenina dedica aproximadamente 27 horas al trabajo no remunerado en el hogar cada semana, mientras que su contraparte masculina menos de 9 horas. Esto quiere decir que las mexicanas destinan en promedio 3 horas diarias al trabajo no remunerado de los hogares que los hombres.
Esta contraparte desigual puede atribuirse a los roles de género; donde las mujeres tienen menores oportunidades para ingresar al mercado laboral para tener un trabajo remunerado, traduciéndolo en una limitante de autonomía económica.
Además, la edad promedio de las laguneras económicamente activas se sitúa en los 33 años y tienen una escolaridad promedio de 11 años. Así mismo, el 71.82% de esta fuerza laboral ocupada se ubica entre los 20 y 49 años de edad, siendo comprendido en su mayoría por mujeres entre 25 y 34 años de edad.
Por otra parte, las laguneras mayormente desocupadas comprenden el rango de edad entre 15 y 34 años con una concentración del 61.60% de la población desocupada femenina, centrándose mayormente entre los 30 y 34 años.
En el contexto de Políticas Públicas, existe una carencia (o ausencia) de políticas laborales que brinden equilibrio entre el trabajo y la vida familiar que disminuyan estas afectaciones a la vida laboral femenina.
Las principales desventajas a las que se enfrenta la población femenina en general son una alerta y un llamado de atención al mejoramiento de las condiciones sociales y laborales en el mercado mexicano.
Esta desigualdad se presenta en todas las etapas de su vida laboral, incluso antes de iniciarle y después de terminar su periodo de vida laboral. Es indispensable una visión y perspectiva de género que disminuya y eventualmente erradique estas limitaciones a la inserción y crecimiento de la mujer en el mercado laboral.